2.3. Al Ándalus: economía, sociedad y cultura.

Al –Ándalus está asociado a importantes avances económicos. La agricultura tuvo un gran desarrollo gracias al regadío. Los musulmanes difundieron nuevos cultivos como el arroz, el algodón o las medicinales, cultivando también cereales, el olivo y el viñedo. En la ganadería retrocedió la porcina, desarrollándose la ovina y la equina. Se revitalizó la minería, y la artesanía, propio de una sociedad urbana, destacando la seda nazarí o los cordobaneses. El comercio tuvo una gran importancia desarrollándose tanto el interior en el zoco de las ciudades como el exterior. Una economía donde el estado tenía el monopolio de la acuñación de moneda.

Con el paso del tiempo la sociedad se fue islamizando. En un primer momento el mundo musulmán lo componía una minoría árabe, que ocupaba los puestos más destacados y una mayoría bereber dedicados a la ganadería y al ejército. Más tarde se unieron los muladíes, los cristianos que se convirtieron al islam. Debajo de ellos se situaban los mozárabes (cristianos de al-Ándalus) y los judíos que gozaban de libertad de culto, pero tenían la obligación de pagar ciertos tributos. Una sociedad donde también destacan los eslavos de palacio o del ejército. A pesar de esta jerarquía en torno al islám, dependiendo de su origen de sangre o nivel económico podían estar más arriba en el escalafón social.

En al-Ándalus se desarrollaron grandes avances en ciencias como la astronomía, la medicina, la botánica y las matemáticas. Destacan filósofos como Maimónides y en la literatura autores de árabe clásico como Ibn Hazm y dentro del árabe vulgar estilos como el zéjel y la muaxaja. Del campo artístico mención especial merecen la mezquita de Córdoba y la Alhambra.

 

Epígrafes